viernes, 13 de agosto de 2010

LA VILLA DEL CASALE EN EL CONTEXTO DE LA ANTIGÜEDAD TARDÍA III

SOBRE LA VIDA EN LA ANTIGÜEDAD TARDÍA
Si el modus vivendi de una sociedad y de una cultura cambia en apenas un siglo como hemos podido observar si miramos hacia atrás desde nuestra fecha actual, no es de extrañar la transformación que ocurrió a lo largo del período del que hemos hablado otras veces referido a la antigüedad tardía. Además hay que tener en cuenta que debemos partir libres de prejuicios y de anacronismos, catalogando con un concepto u otro realidades que del modo en el que las conocemos ahora en este tiempo eran impensables.

La sociedad pagana
El primer cambio apreciable es la transformación que llevó a cabo una sociedad regida por un pluralismo religioso hacia el Cristianismo, el cambio del hombre cívico al buen cristiano. Gran parte de estos cambios se debe al factor religioso, a la expansión y oficialidad del Cristianismo ya que poco a poco fue implantando un sistema de valores, creencias y situación frente al prójimo bastante diferente de como era antes.
Para no hablar de clase social tan pronto, diremos que hay rangos económicos y sociopolíticos diferentes, pues en este sentido existe una acusada estratificación. Por ello hay que nombrar en primer lugar a una minoría poblacional de “bien nacidos” que como su apelativo indica adquieren la caracterización y su estatus desde el nacimiento. Se trata de una élite social a menudo cerrada, poseedora de tierras y otras fuentes de riquezas del comercio, pero lo que de verdad les da ese factor distintivo es nacer en el seno de una familia de origen diríamos en cierto modo aristocrático. Reciben además una educación elitista con un control de la conducta y de la formación moral.
Entre ellos eran pares, eran iguales. Sin embargo había mucha distancia social pues eran una minoría comparada con una gran masa poblacional más bien humilde. De la heterogeneidad se pueden sacar más distinciones, pero es preciso que retengamos esta diferenciación principal entre personas cuyo estatus lo llevan en la sangre y personas que deben sudar para ganarse algo de reputación, por lo menos salir adelante.

La llegada del Cristianismo
Desde su nacimiento, poco a poco esta nueva religión fue haciéndose espacio en las creencias de la sociedad. El contexto en el que nació y creció le fue muy hostil, muchos perecieron pasando a ser mártires y otros fueron perseguidos y obligados a esconderse. Se derramó mucha sangre porque uno de los problemas con los que se encontró al principio fue el choque de creencias, modos de ver la vida y de actuar basándose en el amor al prójimo, en la solidaridad.
En el arte paleocristiano, totalmente austero sin embargo, podemos observar en la poca iconografía la imagen del buen pastor como guía de un grupo religioso que busca el camino hacia Dios, o la paloma, las guirnaldas, las espigas, etc. símbolos que pasarán a ser iconografía oficial más tarde junto con la imagen de la teothocos, los tres reyes oferentes o la imagen del cosmócrator. Todo ello construido en una simbiosis fruto del paso de un tipo de vida a otro guiado por la fe.
Mientras tanto la Iglesia como institución crecía de forma paralela, tomando a la basílica romana como el lugar donde se lleva a cabo el juicio de Dios y se acogen a los neófitos. Poco a poco va conformándose una institución que ha llegado hasta nuestros días prácticamente con la misma estructura y yo me atrevería a decir que con muchos altibajos por muchas de las actividades y hechos controversistas a lo largo de su historia y que hoy son objeto de crítica. Por lo tanto tenemos un nuevo espacio público (limitado a los bautizados en su fe), una nueva forma de ver el y entender la vida y una nueva forma de poder pues acumulaba riquezas a un ritmo trepidante y muchos obispos incluso se hacían con el control de ciudades partiendo desde su labor como protectores y guías espirituales.
Otro movimiento que se extendió, paralelo a éste, fue el monacato. Fue un fenómeno surgido en Oriente de la ascesis, de la retirada y evasión de lo material para entregarse a lo espiritual. De los lugares apartados se pasó a las ciudades, siendo los primeros monasterios las residencias de personas bien nacidas convertidas al cristianismo, como Agustín de Hipona. Con el tiempo la estructura de los monasterios evolucionará arquitectónicamente y el surgimiento de órdenes religiosas mendicantes configurará una serie de normas y doctrinas caracterizadas por un hábito o vestimenta concreta.
Como resumen, lo que debemos tomar es que hubo una transformación debida a la llegada del Cristianismo. Son muchos los que dicen que éste fue decisivo en la crisis, fue un factor más, pero lo que hizo fue cambiar el modus vivendi y la concepción del mundo y de la vida de una forma radical en el sentido de la rapidez con la que se produjeron los cambios.

Fuente:
BROWN, P. La Antigüedad Tardía. Barcelona: Ariès, 1993, vol 1 (pags 229-303)

LA VILLA DEL CASALE EN EL CONTEXTO DE LA ANTIGÜEDAD TARDÍA II

SOBRE LA ANTIGÜEDAD TARDÍA
Es muy común entre los historiadores la tendencia a la fragmentación cronológica, no como un vicio sino más bien como una necesidad a la hora de contextualizar hechos y emplazarlos en un lugar concreto en la línea del tiempo. Además hay otro aspecto relacionado con el que se acaba mencionar y es el concepto tardío o bajo, verbi gratia horizonte tardío, bajomedieval, etc. aspecto que negativiza en cierto modo el período concreto al aludir, sin querer a veces, al momento de cierre de tal período.
Nuestro objeto de estudio, la Villa del Casale, se enmarca en el contexto de la Antigüedad Tardía. Un análisis exhaustivo del período en general y de las formas de vida en él y relaciones humanas nos hará ver que no fue tan pésima como generalmente se cree y que además no hubo tanta diferencia Oriente-Occidente.
Lo relacionado con la Antigüedad Tardía se vincula mucho a la noción de crisis y decadencia por aquello de la crisis del Bajo imperio. Sigue siendo un tema muy candente y objeto de un ferviente interés material además, pues como se verá a continuación, las fuentes escritas tradicionales van quedando algo obsoletas cuando se comparan con la realidad de los yacimientos que cada vez más están mejor estudiados y documentados, aportando una información verdaderamente útil de lo que pasó en la práctica.
Además de todo esto vemos que no es tarea fácil hablar sobre el Bajo Imperio en relación a su economía, política y sociedad o de los intentos realizados para solventar tal situación. Las invasiones fueron un factor más ya que hubo otros como la acumulación de tierras, la monetarización, la división de un imperio en momentos en los que necesitaba estar más unido que nunca, problemas de recaudación y de cobertura de plazas necesarias, etc. Sin embargo, y ya para terminar con esta introducción, es preciso aclarar que no hubo tanta escisión entre Oriente y Occidente debido a que ambas pasaron por procesos similares en tiempos diferentes, es decir, ambas cayeron pasando por una serie de dificultades económicas, sociales y políticas cuya repercusión aumentó por la presencia y llegada de invasores.

El modelo antiguo
Como ya se dijo en la introducción, el tema que nos abarca se halla estrechamente vinculado a procesos de decadencia y hundimiento. Ello se debe a una tendencia historiográfica basada en diversas fuentes históricas contemporáneas o algo posteriores a los hechos que narran. Pese a ello un análisis de éstas atendiendo a su origen, autor y contenido puede hacernos cambiar de opinión.
Algunos de los hechos que más se mencionan aluden a la presión fiscal y a la dureza de las leyes. La primera está muy caracterizada por la imagen de la huida ante el recaudador de impuestos o de cobijar y mantener a tropas que precisen tal ayuda. Ello es cierto y no hay nada que objetar, ambos hechos son verdad, pero el problema viene a la hora de situarlo, es decir, que unos campesinos se quejen de su recaudador no implica que todo el imperio lo haga. La tendencia a generalizar es un grave problema historiográfico. Por otro lado, con respecto a las leyes podemos encontrar calificativos de dureza y opresión, pero no sabemos hasta qué punto fueron puestas en práctica por carecer de la fuerza suficiente o si aquello a lo que se referían y castigaban era un problema presente y grave. Algo también a tener en cuenta es el partidismo de los autores de estas fuentes, puede tratarse de personas hostiles hacia el régimen.
Pese a todo ello, debemos estar satisfechos de que después de todo no hay límites por ahora en cuanto a la documentación puesto que tenemos la posibilidad de recurrir a fuentes materiales como yacimientos. Es en éstos y como ejemplo de la Villa del Casale donde vemos la realidad de este contexto en la práctica y hasta qué punto son verídicos los testimonios. Aún falta mucho para reconsiderar este modelo basado en el reforzamiento masivo del control gubernamental y otros aspectos, pero si fuera verdad tan mala realidad la pregunta que cabe preguntarse es si hubiesen podido aguantar tanto como en realidad pasó.

Oriente y Occidente
Para hablar del distanciamiento entre sendas partes del Imperio divididas por Teodosio, es preciso analizar las estructuras administrativas, económicas y militares instauradas en el lado Occidental y que pervivieron en la otra parte del Imperio.
El sistema fiscal del Bajo Imperio hacía frente principalmente a una continua devaluación de la moneda, llegando incluso a cobrar y a pagar de nuevo en especie. El problema era que la mayoría del presupuesto iba destinado hacia el ejército, en el momento en el que hubiera problemas diversas unidades iban acantonándose en fuentes de aprovisionamiento para que no les faltase de nada. Por lo tanto la annona o aprovisionamiento del ejército fue fundamental para la economía, tanto que al desaparecer esta función del estado se incrementó el proceso de fragmentación económica. Mientras tanto Oriente no sufrió con tanta gravedad las invasiones y además se defendió algo más la causa de las ciudades frente al gobierno central. Todo ello se observa en la tendencia a acumular riquezas por parte de la zona Occidental (el fenómeno del latifundismo) y a una mejor repartición de las riquezas en Oriente.
Además hay que acudir a los factores locales, que adquirieron cada vez mayor importancia de cara a la fragmentación. Las investigaciones arqueológicas permiten establecer comparaciones entre unos núcleos y otros, por ello nos encontramos con regiones que prosperan frente a otras que no lo hacen.

Organización del trabajo y clases sociales
Diversos historiadores han hablado del cese en la producción de esclavos al pararse las conquistas. Sin embargo la realidad es que hay numerosas fuentes que dicen lo contrario y de hecho la Iglesia en sus comienzos fue uno de los grandes propietarios de esclavos. Este hecho se sabe además por lógica, es decir, si existe tendencia al latifundismo es lógico que aún siga habiendo grandes masas de esclavos; y si además estos grandes propietarios se convierten al cristianismo y ceden sus posesiones a la Iglesia, los esclavos van incluidos.
En fuentes jurídicas también aparecen referencias a los esclavos, el problema ahora surge al compararlo con la práctica y ver hasta qué punto existían diferencias entre colonos y esclavos pues un individuo podía ser denominado servus et colonus. Ambos estaban vinculados a la tierra.
Todo ello justifica en cierto modo los repetidos pronunciamientos pues el hecho de estar vinculados a la tierra les hacía pagar un impuesto correspondiente a ésta, la capitatio, y si no se conoce su paradero resulta imposible cobrarlo.
Por ello se desplegó todo tipo de medidas a menudo represivas y muy duras. La legislación además era muy diferente en comparación entre unas zonas y otras. Después de todo es difícil determinar si se produjo un deterioro entre las clases más humildes pues su situación siempre fue bastante penosa. Mientras tanto la diferencia entre ricos y pobres en cuanto a clase se incrementaba en lo referente a las penas por delitos cometidos.
Con respecto a las clases sociales, concepto aún temprano para esta época, encontramos en la cúspide a un sector senatorial poseedor de inmensas tierras, eran latifundistas. Éstos debían tener una serie de subalternos que la mantuvieran y siervos y colonos que la trabajasen. Entre unos y otros se producían intercambios de dones como aceites o aves. Algo digno de mencionar es el incremento del número de estas personas, el Senado era ya un anacronismo, un fósil de la República pero logró conservarse y permanecer siempre y cuando estuviera al servicio del emperador. Por su parte el ordo ecuestre desapareció a costa de adjudicarles rango senatorial a sus miembros. Todos estos gozaban de grandes privilegios como exenciones fiscales y evasión de impuestos como la glebalis o la collatio.
Los miembros del senado constituían también una aristocracia funcionarial muy evolucionada desde sus orígenes. Estos cargos atraían a la gente mientras los que ya los ocupaban hacían todo lo posible por seguir con ellos pues eran bastante lucrativos y libraban de muchas actividades y obligaciones. La nomenclatura y los emolumentos de estos cargos eran análogos a los del ejército. Sin embargo, después de todo, este sistema era muy poco eficaz debido a tantas bocas que mantener (ejército y demás asalariados del estado) y tantas otras que deben ser mantenidas (frumentarios). Mientras tanto era necesario conservar el número de curiales en las ciudades, pero fue difícil pues muchos de éstos tenían ya una plaza en la administración y no estaban dispuestos a volver.
El verdadero problema, o no, llegó con la venta de estos cargos funcionariales y administrativos. Digo problema porque una vez que se comenzó fue difícil ponerle un cerco y, por otro lado, porque al fin y al cabo resultaba como mecanismo financiero y de selección. No fue sencillo acabar con ello, algunos emperadores lo solventaron mediante un juramento de fidelidad, hecho que mostraba algo de debilidad por parte del gobierno. Cuando la corrupción llegó por afectar a todos los niveles en una sociedad que carecía de procedimientos de transparencia ésta llego a ser otro factor de la decadencia.
Otro rasgo característico de la administración bajoimperial fue la institución del patronazgo, en el sentido de protección más o menos sistematizada del pobre por parte del rico. Donde la administración era débil o se producían ciertos abusos por parte de diversas autoridades, individuos de carácter local (secular o religioso) adquirían el papel de patrón. De este modo se suplantaron a los patronos tradicionales. Ello llegó a ser un problema para el emperador y su administración porque en muchos casos el patronazgo se saltaba todo orden y protocolo establecido arrogando legitimidad de autoridad a quien no la tiene.

Financiación
La riqueza del imperio provenía generalmente de la agricultura, frente a ello estaba el ejército que era la institución que más porcentaje presupuestario se llevaba. Por lo tanto hay una serie de factores económicos que beneficiaron la economía como la inmensa cantidad de tierras, el elevado número de población y consiguiente división del trabajo, productividad per cápita alta y aumento de las exenciones fiscales.
El transcurso de las invasiones y colonizaciones de los pueblos bárbaros redujo el cobro de impuestos por parte del gobierno imperial debido a la ocupación de tierras por los recién llegados. Sin embargo no hay punto de distinción con Oriente pues esta parte también sufrió invasiones y conflictos fronterizos, en este caso con los sasánidas. Sin embargo Occidente tenía más frentes abiertos, reduciendo sus tierras. La reducción de unidades del ejército que en consecuencia hizo decaer la circulación de la moneda con la que eran pagados.
Algo digno de mencionar en este apartado es la inmensa cantidad de bocas ociosas a las que tenía que mantener el estado y, a veces, el innecesario incremento del contingente militar. A estas alturas podemos ya decir que los gastos militares fueron determinantes en la decadencia, pues además de la paga se precisaba su mantenimiento, transporte, etc.
Después de todo regresamos al problema de generalizar y es que resulta complejo calcular los ingresos del fisco y los gastos presupuestarios ya que carecemos de datos suficientes y los que hay no son generales o de fiar. Volvemos a la figura del recaudador de impuestos, era odiado por un bando y necesario por parte del gobierno. Además hay una constante reiteración de leyes relacionadas con el tema de los impuestos.
Nuevas fuentes de ingresos fueron el comercio y las fortunas de los senadores, hecho que podía generar controversia porque era cuando comenzaba a comportar cierta carga ideológica.
Por lo general podemos concluir que el sistema fiscal del Bajo Imperio es un asunto complicado de tratar y lleno de injusticias y no muy bien administrado. Esto lo vemos en el ejemplo de la annona, obteniendo grano de todos los medios posibles para el ejército y para los frumentarios acantonados en Roma principalmente a modo de subsidio. Había mucha irregularidad entre aquellos que necesitaban tal subsidio y los que se aprovechaban de él. Por otro lado está también la monetarización de los pagos, sustituyendo la moneda al pago en especie, hecho que hizo subir la inflación al acuñar el gobierno mucha moneda de escaso valor.
Para concluir con este apartado, decir que por muy precario que nos pareciese este sistema, al final resultó que el Bajo Imperio seguía funcionando pese a las adversidades y que además hay que tener en cuenta factores de índole externa.

Fuente:
CAMERON, A. El mundo mediterráneo en la Antigüedad Tardía. Barcelona: Crítica, 1998, Cap 4 (pags 94-117)

lunes, 9 de agosto de 2010

LA VILLA DEL CASALE EN EL CONTEXTO DE LA ANTIGÜEDAD TARDÍA I

SOBRE LA VILLA
La Villa del Casale es una villa tardorromana emplazada en las cercanías de Piazza Armerina, un municipio siciliano de alrededor de 20000 habitantes localizado en la provincia de Enna, justo en el centro de la isla. De este modo se situaba a medio camino entre Catania y Agrigento. Como se ha dicho se sitúa en el contexto de la Antigüedad Tardía, enmarcada cronológicamente por los historiadores como puente hacia la Edad Media, es decir, entre la crisis imperial del siglo III d.C. hasta poco después de la caída del mismo.
Tal conjunto artístico fue declarado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1997 debido al alto interés artístico, cultural, histórico y cultural de sus mosaicos, los cuales pudieron conservarse gracias a una capa de barro que los cubrió en siglos posteriores. La excavación y estudio de la villa se remonta a las postrimerías del siglo XIX, siendo a partir de la segunda mitad del pasado siglo XX cuando se comenzó un estudio y excavación sistemático más avanzado y fiel a métodos y procedimientos arqueológicos más dignos.
Posiblemente los autores de los mosaicos fuesen africanos por la simbiosis de mosaicos policromados con fondos monocromos. Son además mosaicos con un gran valor antropológico por la información que nos han aportado, sobre todo en escenas eróticas y de caza.
En ella podemos distinguir cuatro núcleos con numerosas estancias pavimentadas con vistosos mosaicos. Todos estos núcleos convergen en un estanque debido a su estructuración en un modelo clásico con peristilo. Hay hipótesis además de que quizás pudiera tratarse de un pabellón de caza debido a gran parte de los motivos de los mosaicos hallados y a la espesura boscosa del alrededor.
Con respecto al propietario, se ha discutido mucho ya que la posesión de grandes y suntuosas residencias era algo típico de los altos sectores sociales. Son muchas las personas a las que se les atribuye la posesión de esta villa, quizás la más famosa y por ello a la que se le ha dado mayor importancia es la del emperador Maximiano (285-305).
Durante los comienzos del Imperio Sicilia pasó por una grave crisis debido al latifundismo y a su fuerte sistema de producción esclavista. En el período de nuestra villa estaba renaciendo económicamente debido al comercio y a su situación de puente con el granero africano, además la alta clase senatorial y otros grandes posesores de tierras volvieron al campo ante la presión fiscal y otros gastos arraigados a la vida urbana. Esclavos y colonos trabajaron a base de brazos, sudor y polvo en los ojos estas tierras que volvieron a generar riquezas con las que comenzaron a construir grandes villas.



FUENTES:
http://es.wikipedia.org/wiki/Villa_romana_del_Casale
http://www.villaromanadelcasale.it/index.php?option=com_content&task=view&id=107&Itemid=188